Es un lugar muy bonito, muy cómodo, pero al ser compartido puede que estén inquilinos que se levante muy temprano o se haga mucho ruido.
Tiene mesa de futbolito, Pingpong y una sala de descanso, el dueño está muy asombroso.
La seguridad está súper bien, está en una zona muy accesible y todos fueron muy amable, no cabe duda que regresaré y también lo recomendare