El hotel es bonito, cuenta con estacionamiento propio, tiene alberca pequeña y no profunda, ideal para pasar el rato en familia.
Las habitaciones son muy “rústicas”, básicas, no te brindan muchas amenidades, adentro hay un ventilador de torre y en el baño tarda mucho en salir agua caliente, nada que no tenga solución pero son cosas que se podrían mejorar.
El servicio de limpieza es bueno, pedimos toallas extras y atendieron la solicitud.
Servicio de restaurante solo en la mañana y a la carta, lo bueno es que tienen una taquería dentro del hotel que trabaja de 4 de la tarde en adelante.
Nuestro viaje fue familiar y de vacaciones, si pretendes estar en la habitación la mayor parte del día no te será muy cómodo.
Entrada y salida en recepción, todo estuvo bien. El personal es muy atento y amable.